NOTRE
DAME de París
Vinculación
socio-Histórica con la época: La época en la que se construyo
N.D constituye una época marcada por la evolución cultural,
política y económica de Europa pues se halla conectada con el
desarrollo de las ciudades, el acrecentamiento del poder real y la
creación de una cultura secularizada que se libera de la tutela de
la Iglesia. Nuevas fuentes de riqueza basadas en el conocimiento
científico y la importancia del comercio y la industria contribuyen
a la creación de la nueva sociedad. Gracias a estas nuevas
estructuras y conocimientos se erigen las grandes construcciones y
entre ellas las catedrales.
Encuadre
estilístico: La obra está datada en el S. XII-XIII. Y
pertenece al estilo Gótico, un estilo que nace en Francia y se
extiende al resto de Europa. Se diferencia varias etapas de este,
perteneciendo N.D al Gótico inicial de la primera mitad. Su autor
son los arquitectos Pierre de Montreuil y Jean de Chilles que
construyeron las fachadas norte-sur de la catedral.
Análisis
Técnico: Empleo de materiales nobles, como la piedra (granito)
labrada en sillares firmados con marcas de cantero. La planta es de
cruz latina dividida en cinco naves. El transepto destaca en planta y
se sitúa casi en el centro de la nave. El crucero se encuentra
coronado por una aguja muy estilizada que acentúa la verticalidad
del edificio. En la cabecera el ábside presenta girola y capillas
radiales. Se aprecian las nuevas técnicas constructivas: la bóveda
de crucería envía los empujes a los arbotantes, arcos aéreos que
transmiten el peso a los contrafuertes situados en el exterior y
éstos a tierra. Los contrafuertes se encuentran rematados con
pináculos. Por último se cubre con un tejado a dos aguas.
Los
elementos de sustentación son arcos apuntados bastante abiertos,
bóvedas sexpartitas en la nave principal y de crucería en las
laterales separadas por fajones. Sobre las naves laterales se
encuentra la tribuna y, sobre ella, una serie de ventanales
organizados por dos arcos con un óculo entre ellos y abrazados por
otro mayor, con lo que presenta tres pisos en altura. Todos los
huecos de ventanales y rosetones aparecen decorados por vidrieras,
con lo que la luz en el interior remite al ideal de espacio místico
perseguido por los arquitectos de la época.
En
el exterior consigue crear un perfecto equilibrio entre la línea
horizontal y la vertical, tanto porque las torres que flanquean la
fachada rematan en terraza, como porque al impulso ascensional de los
portales se opone la horizontal dibujada por la galería de Reyes.
También por fuera se refleja la estructura interna, al observar las
diferentes alturas, y poder contemplar el sistema de contrarrestos.
Su fachada es el prototipo de las francesas, con un esquema en
“hache”, teniendo el cuerpo principal dos torres que la
flanquean, rematadas en terrazas. Cada una de ellas es una perfecta
obra escultórica y cuentan con sendos rosetones. La fachada
principal nos muestra una distribución en pisos y está dividida en
tres puertas por el exterior, con lo que parece que tiene tres naves
en vez de las cinco que presenta. Su ornamentación es riquísima,
perfectamente adaptada al marco arquitectónico Sobre el parteluz se
abre un tímpano encajado entre el dintel, dividido en tres partes.
Las arquivoltas apuntadas están llenas de figuras que recogen la
disposición del arco, como es característico del estilo, en vez de
disponerse radialmente, como ocurría en el Románico.
Dos
torres de planta cuadrada, mochas a cada lado rematan la
construcción. Tienen los cuatro lados totalmente abiertos como
corresponde a los campaniles y son perfectamente iguales. Hermosas y
variadas gárgolas de desagüe y otra serie de figuras de coronación
de aleros completan la escultura de este templo.
Entre
los elementos decorativos destaca el rosetón, elemento decorativo y
funcional ya que permite la entrada de luz. Los relieves de los
tímpanos, arquivoltas, capiteles, etc.
Análisis
estético Formal: Es un edificio religioso en el cual se puede
apreciar tres elementos simbólicos principalmente: La gran altura
del edificio y su verticalidad plasman la idea del triunfo de la
vida; La iluminación permitida por la reducción del grosos de los
muros y la apertura de grandes ventanales simbolizan la inteligencia,
que todo lo ilumina, el triunfo de la religión que ilumina al
hombre; de la política cuya luminosidad tiene que regir la ciudad, y
de la justicia, que debe estar presidida por la claridad; La utilidad
práctica de los edificios en torno a las necesidades del hombre
hacía del ser humano el centro del mundo y del arte gótico.